Mi doble va caminando sexy,
Se arregla el pelo,
Se contornea, mira suficiente.
Observa la calle por el balcón, sintiendo que lo tiene todo.
Y de golpe se gira, me mira, suspicaz, con un gesto superado y soberbio.
Yo siento que no tengo nada.
Lo pienso, y me arrollo como un feto.
Veo incoherencias, situaciones egoístas.
Me hiero.
Veo mugre, violencia, escucho gritos.
Empiezan a caerme lágrimas.
La miro, con una mirada usurera
Ella comienza a sudar,
Respira fuerte, conecta conmigo
Con lo que estoy sintiendo.
Repentinamente
Viene el niño, me mira,
Sus ojos se ponen vidriosos
“si vos lloras, yo lloro” – dice, y queda en silencio.
Y entonces entendí, el “si te duele, me duele”
La comprensión, la conexión,
Y lo abracé,
Como quién abraza al amor.
Y entonces entendí que Si,
Que lo tenía todo.
Ilustración de Javier Perez